Decide bién antes de votar!!
Cada cinco años todos los partidos políticos nos prometen cambios y los ciudadanos abrigamos la esperanza de q esta vez se den. Sin embargo, finalmente todo sigue igual. Es lo q, lamentablemente podría suceder con el nuevo Congreso q se instale el 28 de julio, a decir de las listas parlamentarias q, como siempre, se han presentado a última hora.
Con pocas excepciones, lo q hemos visto en los últimos días es una sucesión de personajes impresentables incluidos en muchas listas, con el visto bueno o la vista gorda de las cúpulas partidarias, q siguen sin entender su grave e inexcusable responsabilidad en la recuperación del prestigio del Poder Legislativo –actualmente por los suelos–, el sostenimiento de la institucionalidad democrática y la misma gobernabilidad del país.
A este paso, el Congreso de los ‘comepollos’, ‘mataperros’ y ‘roba luz’ podría quedar en anécdota. Pero nada de esto parece importar a las dirigencias. Y ha sido la prensa independiente la q ha tenido q salir a denunciar la falta de filtros partidarios, la displicencia de las cúpulas, la interferencia de personajes tras bambalinas o, peor aun, la carencia de escrúpulos de quienes habrían subastado al mejor postor vicepresidencias o cupos parlamentarios.
¿Es eso lo q entienden por democracia? Los peruanos hemos quedado estupefactos por los espectáculos penosos e indignantes protagonizados no solo por nuevas figuras, sino por otras q pretenden la reelección.
Así, una enfermera de verbo desbordado quiere enjuiciar a un partido por sacarla de la lista, de la q antes se sacó a otros, entre ellos un personaje vinculado a Montesinos. En la misma lista, un desafiante operador fujimorista q va por la reelección defiende a capa y espada el peor significado de inmunidad parlamentaria (como impunidad para sí mismo). Otra agrupación se ha quedado sin plancha presidencial, luego de q sus dos vicepresidentes renunciaran tras denunciar q se habría vendido el primer puesto de la lista. Y, una alianza mayor estuvo a punto de romperse por los celos y antipatías entre algunos de sus miembros, luego de q, como en otros casos, se hiciera uso, abuso y burla del sistema de elecciones primarias.
En este preocupante contexto, tras pocas correcciones y purgas, propiciadas por la prensa, lo que sigue predominando es la mediocridad, el amiguismo, la adulonería y las trayectorias escandalosas y hasta delictivas, antes q la capacidad profesional, la trayectoria ética, la vocación de servicio, el compromiso democrático y el amor por el Perú.
Evidentemente no se puede generalizar ni meter a todos en un mismo costal. Pero, lo q todo esto nos demuestra es la extrema necesidad de una renovación profunda de la clase política, tanto por una razón democrática de fondo como por una simple cuestión de supervivencia.
Los partidos, hoy, tienen q ser extremadamente autocríticos, no solo para replantear sus estrategias de campaña, sino para escrutar a quiénes están llevando al Gobierno y al Congreso, institución q, para ser coherente y empezar a reconciliarse con el país, debe retomar con suma urgencia los proyectos de renovación por mitades, el voto libre y la revocación parlamentaria.
En cualquier caso, la decisión queda ahora en manos de los ciudadanos q exigen el fortalecimiento democrático, en el entendido de q es el mejor sistema para garantizar el disfrute de libertades y el desarrollo económico y social.
A falta de solidez partidaria, los votantes tienen q evaluar y analizar cada lista para elegir, de modo responsable, a quien exhibe excelentes credenciales profesionales éticas y democráticas, y a quien sabe seleccionar a sus acompañantes y cuadros para aplicar un programa de gobierno q nos encarrile definitivamente en la ruta del desarrollo sostenible e inclusivo.